A finales del siglo XVI y el transcurrir el siglo XVII se produce en la región del Orituco acontecimientos Geo-politicos como en muchos lugares de nuestros espacios geográficos que marcan de manera significativa la estructura social con la que hoy contamos, siendo uno de estos acontecimientos la incorporación de los Afro descendientes a las actividades económicas traídas por los colonizadores, para explotar las extraordinarias riquezas con las que contaban las bellas planicies del Valle del Río Orituco, trayendo consigo sus costumbres y tradiciones las cuales las practicaban en los pocos ratos libres que tenían, era tanto el trabajo que tenían que lo realizaban solo en tiempo de fiestas religiosas podían poner en práctica estas manifestaciones culturales. Según registros históricos señalan que un grupo de negros esclavos que laboraban en la hacienda Tocoragua, que hoy pertenece a la juridicción de la parroquia de San Francisco Javier de Lezama. Se trasladaron a trabajar en la hacienda Santa Juana de San Rafael de Orituco; estos negros continuaron con la tradición ancestral de realizar cantos, bailes y toques de tambor en honor a San Juan Bautista y como una manifestación de protesta en contra de la esclavitud y a favor de la libertad.
Kimbanganos de San Rafael de Orituco
ResponderEliminarA finales del siglo XVI y el transcurrir el siglo XVII se produce en la región del Orituco acontecimientos Geo-politicos como en muchos lugares de nuestros espacios geográficos que marcan de manera significativa la estructura social con la que hoy contamos, siendo uno de estos acontecimientos la incorporación de los Afro descendientes a las actividades económicas traídas por los colonizadores, para explotar las extraordinarias riquezas con las que contaban las bellas planicies del Valle del Río Orituco, trayendo consigo sus costumbres y tradiciones las cuales las practicaban en los pocos ratos libres que tenían, era tanto el trabajo que tenían que lo realizaban solo en tiempo de fiestas religiosas podían poner en práctica estas manifestaciones culturales.
Según registros históricos señalan que un grupo de negros esclavos que laboraban en la hacienda Tocoragua, que hoy pertenece a la juridicción de la parroquia de San Francisco Javier de Lezama. Se trasladaron a trabajar en la hacienda Santa Juana de San Rafael de Orituco; estos negros continuaron con la tradición ancestral de realizar cantos, bailes y toques de tambor en honor a San Juan Bautista y como una manifestación de protesta en contra de la esclavitud y a favor de la libertad.